El ministro argentino de Producción y Trabajo, Dante Sica, rechazó la posibilidad de bajar las retenciones a las exportaciones de vino y aumentar los reintegros al sector que le habían solicitado representantes de los gobiernos de San Juan y Mendoza como medidas para incentivar una mejora del precio de la uva.
El planteo fue porque la próxima cosecha está cada cada vez más cerca y hay un panorama de exceso de stock víno que se estima hará caer el precio del kilo de uva en perjuicio del sector viñatero y por eso hacen falta medidas para tonificar el mercado.
La respuesta del funcionario nacional fue que el Gobierno no puede tomar ese tipo de medidas porque no tiene margen fiscal y a cambio propuso armar una mesa técnica para evaluar la situación del sector.
"Le advertimos al ministro Sica que el sector vitivinícola está pasando por una grave situación", dijo el ministro de la Producción de San Juan, Andrés Díaz Cano, uno de los participantes en el encuentro. "Yo no tengo ninguna expectativa de que vaya a haber alguna ayuda", agregó el titular de la Corporación Vitivinícola Argentina, Ángel Leotta, que también estuvo en la reunión.
En el encuentro, que tuvo lugar pasado el mediodía en dependencias del área nacional, participaron también el secretario de Agricultura, Ariel Lucero, representantes del gobierno mendocino y de cámaras de la vecina provincia.
Situación
Según estimaciones del sector, en la actualidad hay mucho stock vínico al punto que se calcula que desde el 1 de junio del próximo año habrá el equivalente a 10 meses de despacho correspondientes a la cosecha de este año. Y si se le suma la próxima vendimia habrá un total de 30 meses de despacho.
Semejante volumen de vinos hará caer el precio de la uva y por eso el planteo de que se tomen medidas urgentes para revertir la situación. Entre ellas, el pedido al ministro Sica era que se aumenten los reintegros a las exportaciones, por lo menos del 2,75% al 5% y que se bajen los reintegros. "Por lo menos bajar los aranceles a cero durante un año", ejemplificó Leotta.
Con semejante panorama, en el sector viñatero están preocupados porque no remontará el precio del kilo de uva. En la cosecha pasada se llegó a pagar 4 pesos por el kilo en las bodegas para vinificar y algunas mosteras llegaron a abonar hasta 4,30 pesos por kilo. Con precios tan bajos en el sector hablan de que ni siquiera se pueden llegar a cubrir los costos y encima para esta vendimia todas las tareas e insumos vinculadas a la actividad han subido una enormidad.
La Federación de Viñateros de San Juan difundió dos semanas atrás un informe realizado entre productores de San Juan y de Mendoza, que indica que la próxima cosecha será igual o menor a la del año pasado, porque aseguran que se registran bajas de hasta 40% en la producción de variedades de uvas para pasas, y hay menor volumen en las de vinificar. Es por los daños de granizo en Mendoza y por insuficientes abonos y fertilizaciones realizado, ante el quiebre económico que sufre el sector.
El documento busca desintalar las versiones que indican que como habrá mayor cantidad de uva caerá el precio del kilo.