Lanzada al mercado hace cinco años y comercializada en todo el Cono Sur, la tecnología Intacta RR2 Pro se consolida como una de las plataformas más importantes para la región y ya explica un 25% del área sojera argentina.
Y para esta campaña, desde Bayer proyectan que el área sembrada con Intacta crecerá 15%.
Intacta es una tecnología desarrollada por Monsanto antes de ser adquirida por Bayer que representa la segunda generación de la tecnología RR (roundup ready, resistente al herbicida glifosato) y cuenta también con la proteína Bt que protege a la planta de las principales plagas lepidóptera.
"Ya son más de 13 mil los productores que optaron por firmar la licencia de uso que los habilita a sembrar y comercializar granos Intacta, reconociendo que va a hacer un pago por el uso de la tecnología", dijo Matías Ipiña, gerente del Negocio de Soja para Argentina de Bayer.
Agregó que "desde el año 1, en la campaña 2013-2014 a la fecha, se han lanzado más de 75 variedades Intacta y en esta campaña se están lanzando materiales que forman parte de la segunda generación de Intacta, con materiales que reemplazan a los anteriores con más productividad".
Según el ingeniero agrónomo, la tecnología ganó terreno asentada sobre "4 pilares". "El primero es más rendimiento: en promedio de todos los materiales entrega más de 330 kilos por hectárea versus la RR1. En segundo lugar la protección contra insectos, ya que controla las principales plagas lepidópteras en soja. En tercer lugar es el aporte a un mejor manejo de malezas y en cuarto lugar están los beneficios intangibles, que lo cuantifica cada productor en función de la experiencia en su campo, por ejemplo la siembra en planteos restrictivos de soja de segunda", argumentó Ipiña.
En esa línea amplió que "al haber más trigo, hay más chance de incorporar la tecnología Intacta. Al mismo tiempo indicó que tanto en las redes propias como las redes oficiales e institucionales -citó Aapresid, por ejemplo- y otras redes privadas, los materiales RR de segunda generación tienen rindes superiores a la RR1".
Hacia el futuro, el gerente del Negocio Soja de Bayer, puso el ejemplo del caso de Córdoba, pronvincia donde la producción de soja podría crecer 8% si se usa la tecnología Intacta, especialmente en los campos del norte provincial.
Los refugios
Por otra parte, Juan Manuel de Santa Eduviges, líder de Desarrollo de Soja y Algodón de Bayer para Sudamérica, alentó el uso de refugio de plagas en los lotes con Intacta en al menos un 20% del total implantado con esta biotecnología.
"El refugio es una porción del lote o del campo sembrado con una variedad de soja que no contenga el gen Bt, lo que permite que los insectos susceptibles puedan reproducirse y mantener una población susceptible numerosa capaz de diluir los posibles insectos resistentes sobrevivientes en Intacta RR2 Pro y así mantener baja la frecuencia de los insectos resistentes".
En función de la sostenibilidad de esta tecnología, el experto indicó que "cuando uno analiza el incremento de rendimientos en soja, en los 3 principales países productores, indicó que el progreso vía la genética en EEUU es de 38-39 kilos por año, lo que en 20 años creció 800 kilos, en Brasil el crecimiento es de 40-41 kilos por año, mientras que en Argentina solo creció 12 kilos de soja por año, lo que habla a las claras que si no se paga por el avance tecnológico y la investigación que eso requiere, no hay progreso similar a nuestro competidores".
Santa Eduviges indicó que en los 4,5 millones de hectáreas de soja en Córdoba, hoy la tecnología Intacta es muy viable en 2 millones de hectáreas y posibilitaría que toda la cadena, el estado y los productores pueden generar mayores ingresos.
A la vez destacó que en Brasil ya tiene fecha de lanzamiento de las sojas con tecnologías Intacta 2, que cuenta con tecnología Xtend en soja, que le adiciona al germoplasma de la oleaginosa la resistencia al herbicida hormonal Dicamba. Pero en Argentina en virtud de que no existe una Ley de Semillas, esa tecnología no estará disponible.
Además pronosticó hay líneas de investigación y desarrollo para mejorar la calidad del aceite, y aumentar su resistencia a chinches y roya, y ampliar su uso como biocombustible o bioproducto, entre otras innovaciones.