Los pequeños y medianos productores nucleados en la Federación Agraria Argentina (FAA) se declararon en estado de alerta frente al tratamiento del proyecto de Ley del Presupuesto 2019, que entre otros aspectosfaculta al Poder Ejecutivo a elevar las retenciones a la soja hasta un 33 por ciento (aranceles de exportación) y modificar el actual sistema tributario para el pago determinar el pago de los bienes personales.
"Hace días nuestra entidad emitió un comunicado titulado ?A más presión fiscal, menos empleo', donde alertábamos que los productores más chicos no estamos en condiciones de enfrentar las posibles modificaciones impositivos y tributarios que en estas horas se barajan en el Congreso. Les pedimos a los legisladores nacionales que no avancen con estos cambios que profundizarían la crítica situación que atravesamos", señalaron los federados, en alerta ante el trámite parlamentario de la ley de leyes.
En los últimos días, a ese comunicado de FAA se sumó el que firmó junto a las entidades con las que conforma la Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias (espacio que reúne a las otras entidades ruralistas Sociedad Rural, Coninagro y Confederaciones Rurales).
Asimismo, hubo Consejos de Delegados en los distritos 3, 5, 6, 9 y 10 de la entidad, donde se expresó la preocupación que mantiene en vilo a las bases federadas. "Este rechazo y el alerta ante las posibles modificaciones se repite en las consultas que recibimos de pequeños y medianos productores de todo el país y en los relevamientos que realizamos en todos los distritos", indicaron desde FAA.
"Los cambios que hoy están en agenda en relación con el impuesto sobre los bienes personales y con la carga tributaria que recaerá sobre nuestras espaldas resultan claves para el resultado final de la próxima campaña de miles de familias de pequeños y medianos productores. Por eso los rechazamos enfáticamente", señalaron los federados.
Para los dirigentes de la entidad el actual estado de cosas: "Son todas incertidumbres. Ya venimos preocupados por el clima, la dificultad para acceder al financiamiento y para mantener nuestra competitividad y ahora nos encontramos ante la posibilidad de que una vez más los políticos decidan someternos a mayores cargas impositivas y tributarias, mientras ellos siguen despilfarrando nuestros recursos, sin hacer ajustes sobre sus propios gastos".
Por último los productores que se definen como 'víctimas' se preguntan: "¿Siempre tienen que esquilmarnos a los productores?; ¿qué pasa con el poder Judicial?; ¿cuánto se ahorró en gastos políticos, vehículos oficiales o gastos superfluos?; ¿cómo puede ser que no encuentren nunca otra variable de ajuste, más que seguir aplastando a quienes damos vida a los pueblos con nuestro trabajo? Les pedimos a los diputados y senadores que tomen conciencia de que no podemos seguir soportando una carga mayor a la que ya tenemos. Tienen que encontrar otra salida"