Y lo hace tras la guerra comercial entre China y los Estados Unidos [EEUU], y ante las buenas perspectivas productivas y climáticas de su principal rival en el sector: Argentina.
También se suma el dinamismo -pero esta vez por el lado comprador- de México, quien está adquiriendo más soja a EEUU que China.
Según los expertos brasileros en el sector,
Los agricultores brasileños buscan un respaldo para desarrollar un contrato de futuros de soja que haga más fácil los negocios con China, en un momento de altas tensiones comerciales entre Pekín y Washington.
"Agricultores, analistas, bancos e incluso un economista del Departamento de Agricultura de Estados Unidos dijeron que tendría sentido establecer
Un contrato de ese tipo tendría sentido como cobertura contra los crecientes riesgos, en la medida en que divergen los precios de la soja en Brasil y Estados Unidos.
"A los productores locales de soja les gustaría ver un nuevo contrato transado en Brasil o Argentina", señaló Bartolomeu Braz, presidente de la asociación brasileña de agricultores de granos, Aprosoja.
La prima de la soja portuaria brasileña avanzó a un diferencial récord de alrededor de US$ 2,00 sobre los precios referencia de la Bolsa de Mercancías de Chicago "tras la decisión de Pekín de aplicar aranceles de 25,00% sobre la soja estadounidense en julio, en represalia por tarifas impuestas por el presidente estadounidense, Donald Trump".
De acuerdo con Reuters, "Un nuevo contrato podría convertirse en una alternativa a la Bolsa de Chicago, que domina el mercado global para los precios de la soja. La matriz de la Bolsa de Chicago, CME Group Inc, no respondió de inmediato a una solicitud para formular comentarios".
El ruralista Braz debatió la idea con el embajador argentino en Brasilia y la semana pasada abordó el tema ante un grupo de operadores chinos. Todo ello, se realizó en coordinación con el Frente Parlamentario Agropecuario [FPA], el poderoso lobby agropecuario del Congreso brasileño.
"Los próximos pasos involucran la búsqueda de asesoría técnica y legal para avanzar el proceso", dijo Braz en un cruce con la prensa la semana pasada a propósito de la reunión con la FPA.
Estados Unidos despachó el año pasado alrededor de US$ 12.000 millones en soja para el mercado Chino. Brasil, en tanto, envió por alrededor de US$ 20.000 millones.