El ministro argentino de Energía, Javier Iguacel, reiteró este lunes que en septiembre y octubre habrá nuevos aumentos en las tarifas de luz y gas, y justificó el aumento en los combustibles en que la Argentina "tiene la nafta más barata de la región".
Iguacel se refirió al nuevo aumento registrado en los combustibles en las últimas horas y, sobre el punto, reconoció que "hubo un intento de hacer un acuerdo, pero fue muy difícil porque el barril de petróleo aumentó".
"Les dije a los señores de YPF que juzguen y pongan el precio que corresponda. Y ellos pusieron el precio de combustible teniendo en cuenta cuidar a sus clientes y seguir invirtiendo para desarrollar el enorme potencial que tenemos", subrayó.
Aclaró que la Argentina "tiene la nafta más barata de la región" y precisó que "en Uruguay está a 45 pesos el litro, en Brasil 38 pesos, en Chile entre 40 y 45 pesos; en el mundo es más cara".
En Argentina, desde este domingo a la madrugada, la nafta en las estaciones de servicio de YPF se vende un 5% más (el aumento fue superior al previsto), el litro de súper pasó a costar alrededor de $27,83 en Capital Federal; en tanto, la premium subió a $33,20.
Axion, otra empresa que estaciones de servicio en todo el país también aumentó sus precios y este martes lo hizo Shell, quien dispuso el aumentó más alto de entre 9 y 12%.
"Vamos a cumplir con las metas fiscales que nos propusimos. Queremos un sector energético competitivo, fuerte, y que no requiera subsidios del sector público, con la única excepción de la tarifa social", dijo el funcionario.
Iguacel se expresó así en una reunión de coordinación de Gabinete Económico encabezada por el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne.
"Vamos a hacer una revisión de tarifas en septiembre y octubre", sostuvo el ministro y volvió a criticar la política energética del gobierno anterior.
Añadió al respecto que el Gobierno debe "seguir con una corrección" en las boletas de luz y gas, pese a los tarifazos verificados en los últimos dos años que generaron fuertes protestas de usuarios.
"La luz y el gas tienen tres componentes en la factura. Uno que es la energía en si misma, producir, el otro es el transporte y el otro la distribución. Del transporte y la distribución, las tarifas ya están corregidas. Ya no hay más aumento salvo la corrección por inflación. Que es la mitad de la boleta", consideró.
Indicó que "lo que heredamos en materia energética fue una catástrofe. Si hubiéramos desarrollado el potencial de Argentina en 2006 ó 2007, estaríamos a valores de la energía a la mitad que nos cuesta producirla. Casi no tendríamos más aumentos".