El Presidente de la Cámara de Productores Avícolas (Capia) de Argentina reclamó que vuelvan las retenciones a las exportaciones de maíz y de trigo "aunque sean pequeñas y transitorias".
Javier Prida se dirigió al sector de los agricultores y planteó que "tal como aceptó que el Estado los ayude y las saque (a las retenciones) de la noche a la mañana, ahora debería tomar nota de que en febrero estaban vendiendo el maíz que cosechó en enero a $2.400 y hoy lo venden arriba de $4.300".
El presidente de Capia llamó a los productores a admitir que "están casi redoblando la plata", y agregó: "No hay que pensar sólo en nosotros sino también en el consumidor, y ver de qué manera hacemos el esfuerzo compartido entre todos para contribuir de alguna manera a poner algo en la mesa de los argentinos".
Prida afirmó: "así no podemos seguir: los tamberos están arruinados, a los feedlots no les cierran los números y ya prácticamente no conviene convertir carne, y los polleros están en una crisis enorme".
"Tanto el maíz como el trigo deberían tener una retención, aunque sea pequeña y transitoria. De esos $2.400 a los $4.300 hay aproximadamente 1.900 pesos; pagando 10% de retenciones te siguen quedando casi $1.500 pesos de ganancia".
Para Prida, la visión de los dirigentes ruralistas que rechazan la posibilidad de una nueva imposición de las retenciones es "egoísta". Su argumento es que "si el Gobierno incumpliera su palabra sobre las retenciones con un dólar a 20 ó 21 pesos tendrían razón; pero con el dólar a 28, saben que no es así".
"En 2015, cuando nos enteramos que sacaban de un plumazo las retenciones, advertimos que estábamos de acuerdo con la medida pero creíamos que debía ser un proceso paulatino, principalmente en el caso del maíz", aseguró.
Para Prida, la decisión del Gobierno "era lógica, necesaria y había que buscar una solución porque nos estábamos quedando sin producción de maíz". Sin embargo, el dirigente afirma que "nos pareció muy violento eliminarlas de golpe, en eso el Estado se equivocó".
Su sugerencia es "que nos pongamos todos a trabajar en serio y a preguntarnos si los 1.500 pesos más de lo que ganábamos antes no nos alcanzan y necesitamos los $1.900, o si podemos dejar un pedacito en la mesa para la repartija, porque el maíz y el trigo no están dejando nada".
"En el lugar del Gobierno, hubiese parado la baja escalonada que tiene la soja del 0,5% mes a mes, y hubiese llegado a un consenso para buscar entre todos el número, que puede ser del 10, 12 o 15%, y después volverse a escalonar", dijo.