Un conjunto de entidades ruralistas de Argentina, especialmente las que agrupan a los tamberos, expresaron hoy sus queja por la crisis en que se mantiene el sector con un llamado de atención al Gobierno nacional, que justamente este lunes publicó datos de un incremento de 10 por ciento en la producción de leche durante el primer cuatrimestre de 2018.
"La Nación sólo muestra datos, y no presenta soluciones concretas. Así las cosas, el cierre de tambos se acentúa día a día y la producción sigue en caída libre. Industria, supermercados y Estado cobran pero dejan solo migajas al productor", alertaron los ruralistas.
Las quejas se plantearon en comunicado conjunto de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), la Sociedad Rural Argentina, la Asociación Productores de Leche (APL), la Unión de Productores de Leche de Mar y Sierras (UPL), Una Sola Voz Cuenca Abasto (USV) y la Cámara de productores de Leche del Oeste Bonaerense (Caprolecoba).
Las entidades reclamaron "recomposición del precio" de la leche, acortamiento inmediato de los plazos de pago, y solicitaron " que el gobierno revea los tiempos para aplicar herramientas de financiamiento que estén al alcance de los productores. De lo contrario, lo único que se logra es gradualismo en el quebranto".
En el comunicado echaron también responsabilidades sobre los procesadores de la leche. "La industria no se hace responsable, mira para otro lado y no da respuestas". Y a los bancos: "las tasas son imposibles de pagar".
"La vaca come en dólares y vende leche en pesos: nuestros insumos aumentaron el 40% y la leche solo el 10% en lo que va del año. Ecuación mortal para los tambos, sector que viene herido desde hace muchos años", expresaron.
Los dirigentes ruralistas indicaron que "los productores lecheros manifestamos descontento, desconcierto y preocupación luego de haber participado el miércoles 6 de junio pasado de la Mesa Provincial de Lechería. Ninguno de los otros eslabones mostró intenciones inmediatas de recomponer la situación de la producción láctea".
"Tanto los funcionarios nacionales y provinciales, como los representantes del CIL (grandes industrias) y de Apymel (pequeñas y medianas industrias), solo esbozaron líneas de trabajo a analizar sin dar ninguna respuesta concreta para el corto plazo", expresaron.
"Hoy los tambos bonaerenses se endeudan cada día más, se ponen en peligro muchas fuentes de trabajo, se ha paralizado la inversión y comienza a cortarse peligrosamente, la cadena de pagos", concluyó el comunicado.