El producto se denomina Sojapar R34 y fue lanzado en el distrito de Capitán Miranda, Itapúa. Se trata de una nueva variedad de soja desarrollada por profesionales del Instituto Paraguayo de Tecnología Agraria (IPTA) y del Instituto de Biotecnología Agrícola (Inbio) cuya característica es que es ideal para la zafriña, el cultivo de soja -o maíz- que se realiza sobre una soja de primera, tal cual lo permite el clima de algunas regiones de Paraguay (la denominación 'zafrinha' viene de Brasil, donde esta práctica está muy extendida).
La ingeniera agrónoma Estela Ojeda, del Inbio, fue una de las encargadas del desarrollo de esta nueva variedad de semilla de soja. Explicó que la novedad del producto es que tiene un ciclo de desarrollo más corto, en comparación con otras variedades ya conocidas en el mercado, inclusive, las demás paraguayas.
No obstante, esto no le quita las propiedades que caracterizan a las variedades paraguayas ya conocidas, que son el gen de resistencia a la roya asiática y una moderada resistencia a la microfomina.
Ojeda dijo que los propios productores solicitaron una semilla que tenga un ciclo más corto, lo que vuelve a la Sojapar R34 ideal para ser utilizada en la zafriña, periodo que está iniciándose.
La experta comentó que en esta misma campaña estará disponible para ser utilizada tras su lanzamiento, al menos de forma experimental.
La idea es que sea utilizada plenamente para la campaña correspondiente al 2018/2019, explicó.
Creen que esto será posible debido a que han tenido bastante éxito con las primeras dos variedades lanzadas al mercado, cuya principal propiedad es la resistencia a la roya.
De hecho, tras la presente zafra, esperan que los productores se inclinen a estas variedades debido a que hubo dificultades en esta campaña a causa de la mencionada plaga, explicó Ojeda.
"Creemos que para la campaña 2018/2019 va a haber una gran demanda de las variedades locales porque hubo problemas con la roya. Los que probaron en esta ocasión y siguieron las indicaciones están convencidos y eso corre", manifestó.
Otra ventaja de estas variedades desarrolladas por científicos paraguayos es el rendimiento. De acuerdo a relevamientos de parcelas donde se utilizaron, el mínimo de rinde es de 3.500 kilos por hectárea, y un máximo de 4.500. Este número es mayor que el promedio general.