El próximo año se perfila como un período crucial para los inversores. Con mercados desiguales en América Latina y Estados Unidos, los expertos destacan sectores estratégicos como las materias primas y la tecnología, pero insisten en diversificar y tener precaución ante la volatilidad global.
América Latina: Valor atrapado y auge de las materias primas
En América Latina, las acciones y las materias primas ofrecen interesantes oportunidades. Según Felipe Campos, gerente de Estrategia e Inversiones de Alianza, mercados como Colombia y Chile destacan con precios atractivos tras un 2024 difícil, mientras que Brasil y México enfrentaron caídas superiores al 25% debido a problemas fiscales.
"Los precios relativos de la renta variable en Colombia lucen atractivos, con valor atrapado que podría desbloquearse en 2025", explica David Cubides, director de Investigaciones Económicas en Alianza.
En cuanto a materias primas, productos como el oro, los metales y los commodities agrícolas se posicionan como opciones sólidas. Campos resalta el oro como un activo estable en tiempos de incertidumbre, ideal para incluir en los portafolios de inversión.
Estados Unidos: Tecnología, small caps y bonos al frente
El mercado estadounidense sigue siendo un punto focal para los inversionistas. Mariano Sardans, CEO de FDI, destaca el potencial de las empresas de pequeña capitalización (small caps) y sectores tecnológicos, aunque advierte sobre la sobrevaloración actual de este último.
Por otro lado, los bonos con vencimientos largos resurgen como una opción interesante en un entorno económico cambiante. Jorge Carrillo Acosta, experto en finanzas, agrega que Wall Street podría repuntar tras cambios políticos en 2025.
Criptomonedas: Grandes rendimientos, alto riesgo
El 2024 fue un año sorprendente para el bitcoin, que superó los USD 100.000, pero los especialistas instan a la prudencia. "No invertiría más del 30% en cripto, incluso siendo arriesgado, debido a su extrema volatilidad", comenta Carrillo Acosta.
Sardans, en cambio, descarta las criptomonedas como inversión principal, argumentando que carecen del valor intrínseco que poseen activos como el oro.
Riesgos a considerar en 2025
Los expertos coinciden en que el 2025 estará marcado por riesgos macroeconómicos y políticos. Una desaceleración económica global podría generar volatilidad en los mercados, mientras que las elecciones en Latinoamérica podrían influir en las perspectivas regionales.
Además, alertan sobre la liquidez: "Es importante evitar invertir fondos necesarios a corto plazo en activos ilíquidos", aconseja Sardans.
El próximo año promete un abanico de oportunidades tanto en Latinoamérica como en Estados Unidos, con sectores clave como la renta variable, las materias primas y la tecnología liderando las recomendaciones. Sin embargo, la diversificación, el análisis del mercado y la precaución ante riesgos externos serán fundamentales para navegar con éxito el 2025.