En septiembre, los precios de la carne vacuna en los mostradores empezaron a levantar temperatura, de acuerdo a estimaciones de la industria frigorífica.
Esta mayor disponibilidad de bovinos empezará a quitar presión en las carnicerías luego de los aumentos en los precios de venta al público que se registraron durante el primer trimestre del año.
La hacienda de consumo aumentó un 10% en los últimos días y este escenario se trasladó a los mostradores de las carnicerías, con subas de entre $40 y $60 por kilo.