Mientras que en el Sur faltan cosechadores de uva para la industria vitivinícola, en la Mesopotamia, los "trabajadores golondrinas" se van a Brasil engañados por mafias de trata de personas.
La Secretaría de Agricultura garantizó la vigencia de este beneficio en respuesta a la preocupación de distintas producciones regionales que se ven afectadas por falta de trabajadores quienes no quieren ser registrados por temor a perder ayuda social.
Los recolectores de las economías regionales prefieren trabajar en negro o no hacerlo para no perder los beneficios y ponen el riesgo la cosecha. El Gobierno ratificó que mantendrán los subsidios.