Se acumulan evidencias de que el fenómeno climático no apretaría el acelerador hasta octubre, al tiempo que los especialistas le bajan el precio a sus dotes como generador de grandes lluvias.
El dólar diferenciado para el maíz no solo distorsiona este mercado y agrega más complicaciones al de la soja, sino que además alienta la grieta entre productores. No conviene caer en esta trampa.
Nos adentramos en la época del año en la que normalmente disminuye el ingreso de dólares, sin red de seguridad alguna. El Banco Central se encuentra con reservas en un estado crítico.
Una startup israelí ha obtenido permiso para vender lácteos fabricados a partir de proteínas de laboratorio, desafiando a los productos tradicionales derivados de vacas.
La falta de lluvias en estados clave de Estados Unidos impulsa los precios de soja y maíz, mientras que Argentina se ve excluida de los beneficios debido a la intervención y distorsiones en los mercados
El gobierno argentino se enfrenta a una grave escasez de divisas, mientras la inflación descontrolada amenaza con erosionar aún más las posibilidades de una eventual candidatura.
La inflación en mayo se mantuvo por debajo de las expectativas, pero eso no significa que haya motivos para celebrar. Con una tasa anualizada del 146%, la inflación en Argentina es un dato vergonzoso en comparación con otros países de la región.
El fenómeno se espera que alcance su punto máximo de intensidad en la próxima primavera y se extienda hasta bien entrado el 2024, lo que podría impulsar una abundante producción de soja y maíz en Sudamérica y Estados Unidos
El crédito al sector privado está en el nivel más bajo desde 2006. En semejante contexto, el gobierno insiste en castigar al que no vendió toda su soja, si bien trata de disimularlo
El socio del Mercosur no parece dispuesto a detener su máquina de demoler competidores en la producción de granos. La Argentina no puede seguir una sola campaña más con retenciones el 33% para la soja.
A derechos de exportación que el valor del grano no resiste, se suma la brecha cambiaria y la desarticulación de uno de los pocos mercados transparentes que tenía nuestra agricultura
Los países vecinos progresan vendiéndole al mundo, mientras la Argentina sigue atada a fantasías como la de vivir con lo nuestro y castigar al que comercia fronteras afuera