El mercado inmobiliario rural muestra una leve mejora, pero persisten dudas entre inversores
El índice InCAIR de marzo se ubicó en 43,34 puntos: crecen las consultas por campos ganaderos, pero escasean las ofertas agrícolas de calidad
La Cámara Argentina de Inmobiliarias Rurales (CAIR) publicó su informe mensual correspondiente a marzo de 2025, en el que reporta un leve repunte en la actividad del sector. El Índice de Actividad del Mercado Inmobiliario Rural (InCAIR) se ubicó en 43,34 puntos, lo que representa un incremento de 1,72 puntos respecto del mes anterior. A pesar de esta suba, la Cámara advierte que persiste un escenario de incertidumbre política y económica que condiciona tanto la toma de decisiones de los inversores como la voluntad de venta de los propietarios.
El InCAIR -cuyo valor máximo histórico fue de 97,5 puntos en septiembre de 2011- se construye a partir de una serie de indicadores, como la cantidad de operaciones concretadas, avisos publicitarios en medios gráficos, búsquedas y consultas online, y la actividad de los socios de CAIR en todo el país.
Según detalla el informe, marzo mostró señales de una lenta reactivación tras la habitual pausa estacional del verano, aunque los niveles de actividad se mantienen en rangos moderados. "La mejora es incipiente y está lejos de reflejar una tendencia sostenida", indicaron desde la entidad.
Uno de los factores que más condiciona la dinámica del mercado es la escasa disponibilidad de campos agrícolas de muy buena calidad. "No hay una oferta abundante, y eso frena el volumen de operaciones en ese segmento", explican los operadores. En contraste, se mantiene activa la oferta de campos mixtos y se registró un crecimiento en las consultas sobre establecimientos ganaderos, especialmente aquellos con posibilidad de desarrollo o reconversión.
"El interés por los campos ganaderos vuelve a mostrarse firme, lo que puede estar vinculado a ciertas expectativas de mejora en el mediano plazo para esa actividad, tanto en valores como en condiciones de producción", evaluó CAIR.
El índice presentado en marzo corresponde a la edición número 137 del InCAIR y abarca el comportamiento del mercado en todo el territorio nacional. Su elaboración se apoya en el seguimiento sistemático de variables tanto cuantitativas como cualitativas que reflejan el pulso del sector rural inmobiliario.
En conclusión, si bien el informe da cuenta de una leve mejora mensual, el panorama sigue atravesado por factores de desconfianza. La cautela continúa siendo el denominador común entre compradores y vendedores, en un contexto donde las señales económicas y políticas aún no logran consolidar un rumbo claro.