Nota Tecnica

Nuevas estrategias forrajeras: Grama Rhodes y Buffel Grass optimizan la ganadería en el Chaco

Investigadores del INTA Quimilí impulsan la diversificación de pasturas megatérmicas para mejorar la productividad ganadera en suelos con limitantes edafoclimáticas.

 La productividad ganadera en la región del Chaco argentino enfrenta desafíos significativos debido a las condiciones edafoclimáticas adversas. En este contexto, investigadores del INTA Quimilí han desarrollado un innovador estudio para evaluar nuevas opciones forrajeras que permitan mejorar la eficiencia de los sistemas pastoriles.

El estudio se enfocó en la comparación del comportamiento de tres especies de pasturas megatérmicas: Gatton Panic, Grama Rhodes y Buffel Grass. Tradicionalmente, el Gatton Panic ha sido la opción más utilizada por su alto rendimiento. Sin embargo, su limitada tolerancia a suelos salinos y bajos niveles de precipitación ha impulsado la búsqueda de alternativas más adaptadas a las condiciones locales.

El análisis realizado en sitios piloto permitió a los productores evaluar directamente el desempeño de cada especie y seleccionar la más adecuada según el tipo de suelo. La Grama Rhodes se destacó como la mejor opción, mostrando mayor cobertura de suelo y producción de forraje en comparación con el Gatton Panic y el Buffel Grass. Esta especie demostró una notable resistencia a suelos salinos y permitió un aumento en la carga animal, mejorando así la rentabilidad del sistema productivo.

Por otro lado, el Buffel Grass, aunque no tolera altos niveles de salinidad, mostró buena adaptación a suelos de fertilidad media y a regiones con precipitaciones reducidas, de alrededor de 350 mm anuales. Su versatilidad lo convierte en una alternativa viable para distintos ambientes dentro del Chaco.

Los productores involucrados en el estudio han comenzado a expandir la siembra de Grama Rhodes debido a los resultados positivos observados en términos de producción forrajera y eficiencia ganadera.

Además, a través de capacitaciones brindadas por los especialistas del INTA Quimilí, se enfatizó la importancia de adaptar las estrategias de siembra y manejo a los recursos disponibles en cada establecimiento. Desde siembras manuales hasta procesos mecanizados, los productores han implementado técnicas innovadoras para optimizar la implantación de las pasturas.

La diversificación de especies forrajeras no solo mejora la productividad, sino que también contribuye a la sostenibilidad del sistema ganadero en la región chaqueña. La incorporación de pasturas más adaptadas a suelos con limitaciones edafoclimáticas permite optimizar el uso del suelo y reducir la dependencia de insumos externos.

"Esta experiencia demuestra que la diversificación de especies es clave para mejorar la productividad y la sustentabilidad de los sistemas ganaderos en el Chaco", afirmó Úrsula Wolf, investigadora del INTA Quimilí.

Con estas iniciativas, el INTA continúa impulsando la innovación en la producción ganadera, ofreciendo herramientas concretas para que los productores enfrenten los desafíos climáticos y mejoren la eficiencia de sus establecimientos.

Agrolatam.com