El Gobierno simplifica el registro de variedades vegetales para 10 cultivos
La medida busca agilizar la llegada de nuevas variedades al mercado y mejorar la competitividad del sector semillero
El Instituto Nacional de Semillas (INASE) anunció una importante modificación en el registro de cultivares, eliminando requisitos que retrasaban la inscripción de nuevas variedades vegetales. La medida, establecida a través de la Resolución 49/2025, apunta a fomentar la innovación en la industria semillera y a responder con mayor rapidez a la demanda del mercado agrícola.
Desde la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca, señalaron que esta decisión agilizará el proceso de registro de cultivares y facilitará la introducción de nuevas variedades vegetales, permitiendo una mayor adaptación a factores bióticos y abióticos.
Uno de los cambios más relevantes es la eliminación de la obligatoriedad de los Ensayos Comparativos de Rendimiento (ECR), que se exigían para especies de fiscalización obligatoria y demoraban entre dos y tres años la inscripción de una nueva variedad en el Legajo de Fiscalización.
"Estos trámites eran un obstáculo para la llegada de nuevas variedades al mercado", destacaron desde el INASE. Con la eliminación de estas regulaciones, las empresas semilleras podrán tomar decisiones más ágiles y responder con mayor rapidez a las necesidades del sector agrícola.
Los 10 cultivos que se beneficiarán con la simplificación del registro de variedades son:
AlgodónArroz
Girasol
Maíz
Soja
Sorgo
Trigo pan
Trigo fideo
Cebada cervecera
Alfalfa
Las resoluciones que fueron derogadas en este proceso son la 108/1997, 307/1997, 118/1998 del INASE y la 44/1994 de la Secretaría de Agricultura, que establecían y regulaban los mecanismos de inscripción de distintas especies.
¿Qué significa este cambio para el sector agrícola?
Mayor rapidez en la llegada de nuevas semillas al mercado, permitiendo una respuesta más ágil a factores climáticos y productivos. Menos burocracia y costos para las empresas semilleras, incentivando la inversión en mejoramiento genético. Mayor competitividad del agro argentino, facilitando el acceso a cultivos con mayor rendimiento, resistencia a plagas y adaptación climática.
Reducción en los tiempos de aprobación de variedades, favoreciendo a los productores que buscan mejorar la productividad de sus campos.