EEUU

La OMSA insta a reforzar los controles contra la gripe aviar tras la primera muerte en EE.UU.

La Organización Mundial de Sanidad Animal alerta sobre el riesgo de una pandemia y llama a intensificar la vacunación y el monitoreo de aves y animales silvestres para contener el virus.

La gripe aviar, una enfermedad que en los últimos años ha devastado poblaciones de aves, disparado los precios de los alimentos y generado temores de una nueva pandemia, vuelve a ser el centro de atención global tras la primera muerte de un paciente en Estados Unidos. Ante esta situación, la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) ha pedido un esfuerzo internacional para controlar su propagación y evitar su transmisión a los humanos.

La directora general de la OMSA, Emmanuelle Soubeyran, calificó el actual brote de gripe aviar como "sin precedentes" debido a su alcance global y la diversidad de especies infectadas, incluidas aves de corral, cerdos y ganado lechero en Estados Unidos. "Gestionar el riesgo en la fuente animal es esencial para prevenir la propagación del virus y posibles transmisiones a los humanos", afirmó.

El virus suele transmitirse inicialmente por aves silvestres migratorias antes de propagarse entre granjas y, en algunos casos, llegar a los humanos, especialmente a trabajadores agrícolas. Según Soubeyran, una mutación del virus en este contexto podría desencadenar una nueva pandemia.

La OMSA ha instado a los países a aumentar la inversión en el monitoreo del virus en aves y animales silvestres para identificar rápidamente posibles brotes y controlar su propagación. Además, destacó la importancia de la vacunación como una herramienta clave en la lucha contra la gripe aviar.

"Si se usa correctamente, la vacunación reducirá la circulación viral y, por ende, la exposición de los humanos", explicó Soubeyran. Sin embargo, grandes exportadores, salvo Francia, han mostrado reticencia a adoptar esta medida por temor a restricciones comerciales de otros países.

El impacto de la gripe aviar se ha dejado sentir en múltiples frentes. En el sector avícola, ha provocado la muerte de millones de aves, lo que ha afectado la oferta y disparado los precios de alimentos básicos como el pollo y los huevos. Esta situación no solo agrava la crisis alimentaria en varios países, sino que también aumenta la presión sobre los sistemas de salud pública.

Soubeyran enfatizó que la conciencia sobre la situación es crucial para reducir el riesgo de infección en humanos y evitar que el virus circule entre diferentes especies animales. "Ahí es donde se producirá una mutación y, potencialmente, una pandemia", advirtió.

Con este llamado, la OMSA insta a la comunidad internacional a intensificar las medidas preventivas, priorizar la vacunación y fortalecer el monitoreo, recordando que la colaboración global es clave para contener la propagación del virus y proteger tanto la salud humana como animal. 

Agrolatam.com