Economia

Lácteos: exportaciones en alza, pero golpeadas por el atraso cambiario

Un informe del Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA), sostiene que, desde la devaluación de diciembre de 2023, el tipo de cambio se ajustó a un ritmo mensual de apenas el 2%, muy por debajo de la inflación acumulada

Mientras las exportaciones registran un crecimiento significativo, la competitividad se ve afectada por el atraso en la actualización del tipo de cambio.

 Según el informe de la OCLA, basado en estadísticas de la Dirección Nacional de Lechería y del INDEC, las exportaciones de noviembre de 2024 alcanzaron 37.923 toneladas por un valor de 145,1 millones de dólares. 

A pesar de que esto representó una caída mensual del 5,7% en volumen y del 3,2% en ingresos, los resultados interanuales mostraron un incremento del 12,4% en cantidades y del 25,5%.

El informe destacó que, desde la devaluación de diciembre de 2023, el tipo de cambio se ajustó a un ritmo mensual de apenas el 2%, muy por debajo de la inflación acumulada. Este desfase ha erosionado los beneficios que el sector obtuvo inicialmente con como la eliminación de los derechos de exportación y la implementación de un dólar especial para exportadores. Según el análisis de OCLA, el tipo de cambio efectivo actual es similar al de septiembre de 2023, lo que ha reducido la capacidad de compra de leche destinada al mercado externo, afecta no solo los márgenes de ganancia de los exportadores, sino también la sostenibilidad de toda la cadena productiva. Esto repercute en la capacidad de los productores para invertir en mejoras tecnológicas, incrementar la productividad y ampliar su presencia en mercados internacionales competitivos.

Competición

La competencia en el mercado externo exige no solo precios competitivos, sino también eficiencia en la producción y una estructura de costos ajustada. Sin embargo, el sector lácteo argentino enfrenta dificultades para alcanzar estas condiciones debido al elevado "costo argentino", el atraso cambiario y las limitaciones estructurales. Esto sitúa a los productores en una posición desventajosa frente a competidores internacionales que operan en contextos más favorables.

Entre enero y noviembre de 2024, las exportaciones de productos lácteos mostraron un crecimiento acumulado del 10,5% en volumen y del 6,3% en ingresos en dólares, en comparación con el mismo período del año anterior. Estas ventas representaron el 25,4% de la producción total de leche, un aumento significativo frente al 21,3% r.

Los principales productos exportados fueron la leche en polvo (39,4% del valor total), los quesos (32,8%) y otros derivados como manteca, dulce de leche y suero (18,5%). En contraste, las exportaciones de lactosa y caseína registraron una caída del 11,1% en volumen. Brasil y Argelia se consolidaron como los mayores destinos de la leche en polvo argentina, representando el 57,5% y el 31,1% de las exportaciones de este pro.

No obstante, los precios internacionales de productos clave, como la leche en polvo entera, han mostrado una tendencia descendente desde 2022. Este factor, combinado con la pérdida de competitividad cambiaria, ha afectado los ingresos del sector, que se ven presionados tanto por las condiciones externas como por los costos en insumos, logística y producción, que continúan aumentando debido a la inflación ya la falta de medidas que alivian la carga financiera del sector. 

Esto impacta directamente en la capacidad de las empresas para sostener precios competitivos en el mercado internacional, dificultando el crecimiento de las exportaciones y la expansión hacia nuevos mercados.

Un mercado interno de consumo deprimido, con una caída del 10,3% en la demanda hacia noviembre de 2024, agrava aún más la situación del sector lácteo. La reducción en el poder adquisitivo de los consumidores limita las ventas locales, obligando a los productores a depender cada vez más de las exportaciones, que enfrentan sus propios desafíos por el atraso cambiario y los altos costos operativos. Este desequilibrio pone en riesgo la sostenibilidad de la cadena productiva a mediano y largo plazo.l.

En este escenario, el atraso cambiario se convierte en una clave de obstáculo. Mientras no se ajuste el tipo de cambio a un ritmo acorde con la inflación, las exportaciones difícilmente podrán generar los ingresos necesarios para compensar las dificultades del mercado interno. Según la OCLA, "aunque es fundamental mejorar la escala, la eficiencia y la productividad del sector exportador, estos cambios requieren tiempo, y el retraso cambiario actual solo permite exportar para liquidar stocks .

Perspectivas 

El sector lácteo argentino se encuentra en una encrucijada. Si bien las exportaciones han mostrado un desempeño positivo en términos de volumen e ingresos, el contexto económico actual limita su potencial. 

La implementación de medidas correctivas, como la reintroducción de reintegros y una actualización más dinámica del tipo de cambio, es esencial para que la industria pueda capitalizar sus ventajas competitivas y sostener su crecimiento.

Mientras tanto, el desafío inmediato radica en equilibrar las demandas del mercado externo con las necesidades del mercado interno, en un contexto económico que exige respuestas rápidas.