Estados Unidos gana caso de maíz transgénico en México
Un panel de disputas comerciales dictaminó el viernes que las restricciones de México a las exportaciones de maíz genéticamente modificado de Estados Unidos violan el Acuerdo entre Estados Unidos, México y Canadá
Este resultrado le dio a la administración Biden una importante victoria comercial en sus últimas semanas.
La oficina del Representante Comercial de Estados Unidos dijo que el panel de resolución de disputas del T-MEC falló a favor de las siete demandas legales estadounidenses en el caso que lleva mucho tiempo en curso. Dijo que el panel encontró que las restricciones de México no están basadas en la ciencia y violan los capítulos del T-MEC sobre medidas sanitarias y fitosanitarias y sobre acceso al mercado y trato nacional.
El informe final del panel de tres miembros recomendó que México ajuste sus políticas comerciales de maíz al acuerdo comercial. Tiene 45 días para hacerlo según las reglas del acuerdo comercial de 2020 y el incumplimiento podría resultar en aranceles punitivos sobre algunas exportaciones a Estados Unidos.
Los ministerios de Economía y de Agricultura de México dijeron en un comunicado conjunto que estaban en desacuerdo con el fallo pero que lo respetarían, sin proporcionar detalles sobre las medidas que tomarían.
"El gobierno de México no está de acuerdo con la decisión del panel, pues considera que las medidas en cuestión están alineadas con los principios de protección de la salud pública y los derechos de los pueblos indígenas", señalaron las agencias.
No obstante, dijeron que la resolución de disputas era un componente clave del acuerdo comercial T-MEC, y señalaron que México y Canadá prevalecieron sobre Estados Unidos en un caso de disputa sobre reglas de origen automotriz el año pasado.
La disputa por el maíz comenzó seis meses después de que el T-MEC entrara en vigor en julio de 2020, cuando el entonces presidente Andrés Manuel López Obrador decretó que el maíz transgénico estaría prohibido a fines de 2024, una medida dirigida principalmente a las exportaciones de maíz estadounidense. Su sucesora, la presidenta Claudia Sheinbaum, ha apoyado la política.
Después de años de poco movimiento en las consultas, la USTR solicitó un arbitraje para resolver la disputa, desafiando el decreto mexicano de 2023 que prohibió inmediatamente el uso de maíz transgénico en tortillas y masa, e instruyó a las agencias gubernamentales a eliminar gradualmente su uso en otros alimentos y en alimentos para animales.
Estados Unidos argumentó que las afirmaciones del gobierno mexicano de que el maíz transgénico es perjudicial para la salud humana no estaban basadas en la ciencia.
"La decisión del panel reafirma las antiguas preocupaciones de Estados Unidos sobre las políticas biotecnológicas de México y su impacto perjudicial sobre las exportaciones agrícolas estadounidenses", dijo la Representante Comercial de Estados Unidos, Katherine Tai, en un comunicado.
El secretario de Agricultura de Estados Unidos, Tom Vilsack, dijo que la decisión garantiza que los agricultores y exportadores estadounidenses "seguirán teniendo acceso pleno y justo al mercado mexicano".
"También es una victoria para los países de todo el mundo que cultivan y utilizan productos de biotecnología agrícola para alimentar a sus crecientes poblaciones y adaptarse a un planeta cambiante", añadió Vilsack.
En febrero, el gobierno de México suavizó su prohibición inicial sobre el maíz transgénico, permitiendo explícitamente su uso para la alimentación del ganado y productos industrializados para el consumo humano, pero mantuvo la prohibición de su uso en tortillas.
Los funcionarios mexicanos han defendido las restricciones al maíz transgénico en las tortillas y han argumentado que depende de Washington demostrar que sus exportaciones no dañan la salud humana.
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha amenazado con imponer un arancel general del 25% a todas las importaciones de Canadá y México cuando asuma el cargo el 20 de enero, a menos que detengan el flujo de inmigrantes ilegales y fentanilo a Estados Unidos.
De implementarse, esos aranceles parecerían violar las reglas del T-MEC, lo que posiblemente generaría otro caso de disputa.
México, cuna del maíz moderno, prohíbe la siembra de maíz transgénico por temor a que contamine las variedades nativas del grano. Sin embargo, el país es el principal comprador extranjero de maíz amarillo cultivado en Estados Unidos, casi todo el cual es genéticamente modificado.
El gobierno de México espera que los compradores locales importen un récord de 22,3 millones de toneladas métricas durante la temporada agrícola 2023/24.
Entre octubre de 2024 y octubre, Estados Unidos exportó maíz a México por valor de 4.800 millones de dólares, según datos de la Oficina del Censo de Estados Unidos.
México cuenta con más de 60 variedades nativas de maíz, conocidas como razas locales, muchas de las cuales se presentan en un caleidoscopio de colores y presentan perfiles de sabor distintivos.
Este mes, el subsecretario de Economía, Luis Rosendo Gutiérrez, destacó que el gobierno estaba haciendo todo lo posible para proteger el tratado de libre comercio en medio de las amenazas arancelarias de Trump. Agregó que México cumpliría con la decisión del panel.
Grupos estadounidenses e internacionales de agricultura y biotecnología aplaudieron el fallo.
"Esta es la señal más clara de que el mantenimiento de los acuerdos de libre comercio proporciona la estabilidad necesaria para que la innovación florezca y afiance nuestra seguridad alimentaria", dijo Emily Rees, presidenta de CropLife International, que representa a la industria de la ciencia vegetal.