Chile

Rescatando la herencia agrícola: guardianes de semillas preservan la tradición en Chile

Descendientes mapuches trabajan para preservar variedades tradicionales de semillas, fundamentales para enfrentar el cambio climático y enriquecer la gastronomía.

 En un exclusivo restaurante de una viña al sur de Santiago de Chile, un grupo de descendientes del pueblo mapuche está llevando a cabo una labor vital: rescatar y preservar semillas tradicionales. Estos guardianes de semillas, como se hacen llamar, trabajan para mantener vivas especies agrícolas que han sido desplazadas por la industrialización alimentaria y los cultivos de alto rendimiento.

Ana Yañez, una de las guardianas, explica: "Nuestro trabajo consiste en rescatar semillas olvidadas, aquellas que ya nadie reproduce por ser específicas de ciertos lugares o por no ofrecer los mismos rendimientos que las variedades industrializadas".

El grupo también está recuperando prácticas ancestrales relacionadas con la agricultura, como la siembra según las fases lunares y la biodinámica. Delfín Toro, otro guardián, detalla: "Estamos trayendo de vuelta los saberes de nuestros antepasados sobre cuándo plantar y cosechar".

Semillas que alimentan la biodiversidad y la exclusividad gastronómica

La iniciativa no solo tiene un impacto cultural, sino también gastronómico. Los productos provenientes de estas semillas tradicionales han captado el interés de chefs de restaurantes de alta gama, como el de la viña VIK. Pablo Cáceres, chef y guardián, comenta: "Este año cultivaremos 26 variedades de tomate, un porcentaje mínimo si pensamos que existen más de 200. En los mercados solo encontramos unas cinco".

Semillas para un futuro sostenible

La importancia de este trabajo ancestral no se limita a la cultura o la gastronomía. Según Ricardo Pertuzé, agrónomo de la Universidad de Chile, estas semillas son clave para enfrentar los efectos del cambio climático. "El cambio en el clima hace que algunas variedades ya no se adapten bien a ciertos lugares. La diversidad genética que guardan estas semillas es esencial para desarrollar nuevas variedades resistentes", explica.

Esta labor en Chile se suma a movimientos similares en países como India, China y regiones de África subsahariana. Wilson Hugo, oficial de la FAO, destaca la importancia de apoyar iniciativas como esta para garantizar la seguridad alimentaria global. "Hay que apoyarlos, y probablemente eso no sea suficiente; se necesita hacer más", concluye.

La labor de los guardianes de semillas no solo preserva un legado cultural, sino que también asegura la biodiversidad agrícola necesaria para enfrentar los desafíos del futuro.

Agrolatam.com