México se posiciona como el mayor importador de granos de Estados Unidos
México podría convertirse pronto en el principal importador de maíz, sorgo, soya, trigo y arroz provenientes de Estados Unidos, consolidando una relación comercial estratégica y beneficiosa para ambos países.
Durante su participación en la 21ª edición del Foro Global Agroalimentario "Innovando para la Seguridad Alimentaria", Seth Meyer, economista en jefe del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), destacó la importancia de la relación comercial entre México y Estados Unidos en el sector agrícola. Meyer reconoció que Estados Unidos enfrenta un déficit comercial en este sector, lo que refuerza la necesidad de fortalecer los vínculos con México para aprovechar los beneficios de esta cooperación.
El economista subrayó que no existen productos agrícolas que compitan directamente entre ambos países, lo que facilita mantener mercados abiertos y optimizar la especialización en lo que cada nación hace mejor. "Lo que quiero recordarles a los productores es que esta relación comercial es muy buena, y necesitamos que siga avanzando con los mercados abiertos y en aprovechar nuestra capacidad en lo que somos realmente buenos", señaló Meyer.
Aunque China sigue siendo el mayor importador de granos estadounidenses, México ha escalado al segundo lugar, superando a Canadá, que ocupa la tercera posición. Esta tendencia resalta la relevancia de México como un socio estratégico para Estados Unidos en el sector agroalimentario.
Meyer enfatizó que "el comercio entre ambos países es sólido y duradero" y destacó que por cada dólar que Estados Unidos exporta, México envía dos dólares en productos hacia su vecino del norte. "Me parece que esta es una buena relación, y sabemos que México es uno de los mejores socios comerciales de Estados Unidos desde hace muchos años. Estamos trabajando para que nuestro país se convierta en el número uno, y reconocemos que México es uno de los principales exportadores para este tipo de mercado", añadió el economista.
Esta estrecha cooperación entre ambas naciones refuerza la importancia del comercio bilateral y posiciona a México como un jugador clave en la importación de granos esenciales producidos en Estados Unidos, consolidando la relación agrícola entre ambos países y asegurando un futuro de mercados abiertos y beneficios compartidos.