Productores mantienen confianza, pero caen las expectativas a futuro según Ag Barometer
Según el nuevo Índice de Confianza del Campo del Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral, conocido como Ag Barometer Austral, la confianza de los productores se mantiene, aunque con una caída significativa en las expectativas para los próximos 12 meses.
La última medición del Índice Ag Barometer Austral para los meses de julio y agosto muestra una estabilidad en relación a la medición de mayo-junio, con un índice positivo de 139, el mayor valor de su historia, superando el máximo anterior de julio de 2019. Sin embargo, el índice de "Expectativas Futuras" (161) muestra una caída del 6% respecto a la medición anterior, reflejando un deterioro en la expectativa para los próximos 12 meses, tanto en la situación financiera de los productores como en el sector agropecuario en general.
El informe, elaborado por los investigadores del Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral, destaca una caída en el sentimiento positivo relacionado con las expectativas de la situación financiera de los productores, influido por la caída de los precios internacionales de la soja y los márgenes ajustados para la campaña 2024/25, que se tornan negativos en campos arrendados.
A pesar de esto, el índice de "Expectativas de Inversión en activos fijos" muestra una mejora significativa desde la medición anterior, alcanzando su mayor nivel desde mayo de 2022. Esto se debe a la recuperación en la venta de maquinaria y una mayor actividad en el mercado inmobiliario, impulsadas por la baja en las tasas de interés y la falta de alternativas de inversión en mercados de capitales.
En cuanto a la proyección de cultivos, se anticipa un aumento en la superficie sembrada de soja y una disminución en la de maíz para la campaña 2024/25, con una caída estimada en la producción de maíz de alrededor de 10 millones de toneladas. Además, se observa que muchos productores han optado por no vender ni fijar precios en un volumen importante de la cosecha, reservando estas ventas para cubrir gastos futuros.
Un informe de la Bolsa de Cereales revela que se han vendido 35.228.059 toneladas de soja, de las cuales 25.575.418 han fijado precio, y 40.089.312 toneladas de maíz, con 20.375.303 toneladas que han fijado precio.