Crisis en el mercado de maquinaria agrícola en Brasil debido a la disminución del gasto de los productores
El sector de maquinaria agrícola en Brasil enfrenta una importante crisis, con una proyección de disminución del 20% en los beneficios del mercado para el año pasado. Esta caída, la primera desde 2016 y la más pronunciada en casi una década, representa un desafío significativo para fabricantes como Deere & Co. y CNH Industrial NV.
La industria no anticipa mejoras en las ventas para 2024.
A pesar del incremento en la producción de maíz y soja, los precios de estos productos han caído drásticamente, afectando la capacidad de los productores para afrontar la compra de maquinaria a altas tasas de interés. Esta situación ha disuadido a muchos productores de realizar nuevas adquisiciones. Endrigo Dalcin, un productor de Mato Grosso, refleja esta tendencia al no haber comprado maquinaria nueva en el último año y no planear hacerlo en 2024.
Brasil, como líder mundial en varios cultivos clave, ha sido más afectado por la caída de precios en comparación con otros productores. Los precios del maíz en Mato Grosso cayeron más que en Iowa, el principal estado productor de EE.UU. La soja también ha seguido esta tendencia descendente.
Los fabricantes de tractores reciben una sorpresa de un Brasil como potencia agrícola Los precios del maíz en Brasil se sitúan por debajo de los de EE.UU.
La situación se agrava debido a las condiciones climáticas adversas que afectan las cosechas, llevando a los productores a posponer las ventas hasta tener certeza sobre la producción del año en curso. Esta estrategia de espera ha reducido la disponibilidad de efectivo para la compra de equipos, impactando directamente en el mercado de maquinaria agrícola.
John Deere anticipa una caída del 10% en las ventas de maquinaria agrícola en América del Sur para este año, mientras que CNH ha observado una disminución significativa en las ventas minoristas de cosechadoras y tractores grandes.
La previsión de una disminución en las tasas de interés en Brasil podría contribuir a las bajas ventas actuales, ya que los agricultores esperan mejores condiciones de financiamiento para futuras compras. Esto, sumado a los altos costos de inventario en Brasil en comparación con EE.UU., podría llevar a los fabricantes a reducir la producción para ajustar el exceso de inventario,.