Activación del swap con China revitaliza importaciones en Argentina
La reciente activación del swap de monedas con China por un valor de 6.500 millones de dólares ha generado un impacto significativo en el panorama de importaciones en Argentina.
Este acuerdo, anunciado esta semana, desencadenó una avalancha de solicitudes en el Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRA), ya que los importadores aprovechan la oportunidad de convertir sus solicitudes a yuanes.
Durante más de dos meses, los importadores en Argentina habían enfrentado obstáculos para obtener autorizaciones para importar debido a errores y demoras, especialmente en la plataforma de validación de pagos de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP). La activación del swap con China fue recibida con gran expectativa por parte de los importadores, que desde antes de las elecciones primarias venían experimentando retrasos en sus solicitudes.
Ante la creciente cantidad de consultas y solicitudes de cambio de moneda para realizar pagos de importación en yuanes, la Dirección General de Aduanas (DGA) envió una comunicación a todos los importadores explicando el proceso de conversión de moneda. Para llevar a cabo este proceso, los operadores de comercio exterior deben acceder al "trámite SITA - Multinota Electrónica Aduanera - Subtrámite 10138 'Acceso al MULC en Yuanes'". En esta etapa, se solicita la inclusión de la ventaja "ACCESO_MLC_YUAN" en la destinación de importación/declaración SIRA registrada.
El acuerdo del swap de monedas con China se concretó en una reunión bilateral entre el presidente de Argentina, Alberto Fernández, y su homólogo chino, Xi Jinping, en el Gran Palacio del Pueblo en Beijing. El Banco Central señaló que la activación de este acuerdo tiene como objetivo contribuir al desarrollo del comercio bilateral y la estabilidad de los mercados financieros en Argentina.
El presidente Alberto Fernández destacó que estos fondos proporcionados por China son esenciales para respaldar el crecimiento económico en Argentina, promoviendo la producción y el empleo en el país.
Este desarrollo se produce en un momento en que la demora en las aprobaciones de comercio internacional ha afectado a la industria, dificultando los pagos al exterior de insumos críticos y generando presiones en la deuda comercial y las relaciones con los proveedores. Como ejemplo, la planta de General Motors en Alvear, Santa Fe, se vio obligada a detener su producción debido a la falta de insumos. La empresa informó que está trabajando para resolver los problemas de suministro causados por la falta de pagos al exterior.
En este contexto, las autoridades industriales han solicitado al Gobierno que brinde una solución a corto plazo. Según datos oficiales, la deuda comercial de bienes con proveedores en Argentina asciende a alrededor de 40 mil millones de dólares, lo que representa un aumento cercano al 50% en comparación con 2019.