Investigan Posible Brote de Gripe Aviar en Muerte de Lobos Marinos en Necochea
Autoridades y Expertos en Alerta Ante Inusual Aumento de Muertes
La reciente muerte de aproximadamente 40 leones marinos en la terminal portuaria de Necochea / Quequén ha levantado preocupaciones sobre un posible brote de gripe aviar en la zona, según se informó el martes. La terminal es hogar de una colonia de alrededor de 400 lobos marinos de manera habitual.
Expertos del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) llevarán a cabo análisis en las próximas horas para determinar la causa de estos decesos. La Prefectura Naval Argentina ha clausurado la zona como medida preventiva. Además, se ha desplegado un equipo de especialistas del Instituto de Investigaciones Marinas y Costeras de la Universidad Nacional de Mar del Plata y del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet).
Aunque se descartó la gripe aviar en un lobo marino analizado en Mar del Plata la semana pasada, ya se confirmó la relación entre esta enfermedad y la muerte de al menos siete de estos mamíferos en la reserva costera de Río Grande, en la provincia de Tierra del Fuego.
La particularidad de estas muertes radica en que todos los animales afectados eran machos y presentaban sangrado nasal inusual, característica frecuente en la gripe aviar. El rescatista de animales marinos Carlos Leo, citado por Infobae, sugiere que una posible infección podría propagarse rápidamente entre las colonias de lobos marinos debido a su migración estacional.
Las muertes reportadas en los últimos tres días han quintuplicado las ocurridas durante todo el invierno pasado, cuando solo se registraron ocho casos. El mes anterior también se observaron al menos 10 muertes de esta especie. "La magnitud es muy extraña, nunca habíamos presenciado algo similar. Más de 50 muertes frente a ocho en el mismo período de 2022", advirtió el especialista Leo.
El experto subraya que la gripe aviar puede resultar letal en cuestión de 48 horas. Los animales infectados experimentan presión cerebral que causa dolor de cabeza, enrojecimiento de los ojos, sangrado nasal y temblores.
Sobre la posible transmisión de la gripe aviar de los lobos marinos a los humanos, Leo menciona que ha habido pocos casos documentados. Aunque no descarta la posibilidad, afirma que las probabilidades son bajas y que la transmisión podría ocurrir a través de la exposición de un perro al animal infectado.
Para evitar riesgos, la mayoría de los leones marinos encontrados en las playas fueron enterrados en la arena, evitando así la liberación de gases durante la descomposición.