Mercado inmobiliario rural: se reactivó la compra-venta y aumentaron los alquileres
Operadores del mercado inmobiliario rural aseguran que en los últimos meses se observó un claro cambio de tendencia en el mercado de tierras, pasando de la parálisis generada por la pandemia y la guerra en Ucrania a cierta expectativa positiva provocada en los inversores por la cercanía del fin del actual mandato presidencial.
Los operadores del mercado inmobiliario rural aseguran que en los últimos meses se observó un claro cambio de tendencia en el mercado de tierras, pasando de la parálisis generada por la pandemia y la guerra en Ucrania a cierta expectativa positiva provocada en los inversores por la cercanía del fin del actual mandato presidencial.
"Durante este periodo, la mayor actividad que ya se vislumbraba en el semestre pasado, se transformó en operaciones concretadas y podemos afirmar que actualmente ya hay mayor actividad en el mercado. Esto se refleja en más visitas, una mayor vocación de compra y más de una operación concretada a valores satisfactorios para ambas partes, es decir, que responden a la siempre vigente ley de oferta y demanda", destacaron desde la Cámara de Inmobiliarias Rurales (Cair) en un informe reciente, aunque aclararon que la demanda difiere según el tipo de campo y según la zona.Valores muy ajustados
"Estas características del mercado no se pueden hacer extensivas a toda la Argentina. Los campos alejados y marginales o con poca estructura son difíciles de vender. Tendremos que pensar en valores muy ajustados, plazos diferidos de pago y en valor carne, como medida de ajuste ante la inexistencia del peso argentino como moneda", detallaron.
Respecto a los alquileres, desde la Cámara afirmaron que en este primer semestre se concretaron acuerdos y se mantuvieron firmes los valores medidos en quintales de soja.
"En particular, la demanda se mantuvo alta, sostenida y firme para campos agrícolas; y cada vez más firme para campos ganaderos en toda zona productiva al punto de poder aseverar que en esta campaña la misma quedó insatisfecha por segundo año consecutivo. Como es lógica del mercado, esta situación ha producido el aumento en el valor de los alquileres, que se suponía, encontraría un equilibrio para la presente campaña, pero no sucedió así, sino más bien trajo como consecuencia el incremento en los valores, aunque en menor medida y en torno al 5 o 10 por ciento", destacó el informe.
Luego explicó un fenómeno particular que se está dando en ese aspecto, con valores en alza en un contexto de quebranto para muchos productores provocado por la sequía.
"La lógica, luego de una sequía histórica, hubiera sido que los alquileres bajen en función de la renta negativa que muchos arrendatarios y productores la sufrieron y quedaron con deudas. Pero como se dice "a rey muerto, rey puesto", es decir, cambiaron de arrendatarios y otros inversores ingresaron al mercado pagando lo mismo o algo más, en función de la buena renta que se espera para este año", advirtieron.