Es el producto que más aumentó y falta en las góndolas: qué pasa con el arroz

Según un informe de Focus Market, el arroz encabeza el Top 10 de los productos de consumo masivo que más aumentaron en mayo. En el último mes este insumo -clave en la dieta de muchos hogares argentinos- tuvo un incremento del 31,5%. Lo sigue la yerba con un 18,7% y los caldos que subieron un 16,4%.

El aumento enciende señales de alerta ya que coincide con una baja en el stock. Aunque todavía se consiguen algunas variedades en los almacenes de barrio, cada vez es más escasa la posibilidad de conseguirlo en los grandes supermercados: en la góndola no hay arroz y, si hay, sólo son un par de opciones premium de compañías que no están incluidas en los acuerdos de precios. 

También falta arroz en las cajas de alimentos que los gobiernos de distintos municipios de Buenos Aires mandan a los comedores barriales. "A veces viene arroz y otras no", dijo la responsable de un comedor del barrio La Cava de San Isidro. Alguien más, a cargo de un centro de zona Sur declaró: "En vez de arroz muchas veces nos mandan fideos, garbanzos o latas de lentejas". 

Desde una de las compañías más importantes del sector indicaron a MDZ que hay al menos tres factores clave para que se de esta situación. Por un lado, la sequía extrema que provocó una baja de la producción en torno al 25%, convirtiendo a las del 22/23 en una de las peores campañas de las últimas décadas. A eso se suman las presiones del mercado: un alza de precios a nivel internacional y políticas de control de precios a nivel interno. "El valor negociado es irrisorio y el negocio pierde dinero", dijeron desde una compañía ligada a la cadena productiva. 

Esta intervención, previa al desabastecimiento, se acentúa debido a la escasez. Según el Sistema de Informes Simplificados Agrícolas, Argentina incrementó su producción de arroz en un 121% en la última década. Eso significa que actualmente la producción anual estimada es de 1,6 millones toneladas. De esta cantidad, unas 900 mil toneladas se destinan al consumo interno. Ambos números se han visto afectados en la campaña 22/23 debido a la sequía que también afectó a otros países de la región. 

Luego de dos campañas con precios internacionales bajos -en 2018 y 2019- el valor del arroz a nivel internacional fue en alza entre 2020 y 2022. Incluso mejoró en la campaña 22/23 que fue muy crítica no sólo en América Latina sino también en Europa y California, donde ya empieza a normalizarse la producción. 

SI bien las compañías aseguran cumplir con la cuota que les impone el Gobierno para abastecer al mercado interno, la realidad es que en las góndolas de los supermercados no hay arroz , salvo excepciones. Las marcas que aún tienen stock son aquellas que están excluidas de los acuerdos de precios y pueden ajustar su oferta a la demanda. Así, un kilo de arroz que debería estar en torno a los 280 pesos puede llegar a costar más de 1000 ya que se trata de firmas que no tienen restricciones a la hora de ajustar sus precios. 

La situación tendería a acentuarse de no mediar políticas que agilicen la gestión de permisos de importación, ya que el stock de granos este año equivale a lo que habitualmente se consume en 8 o 9 meses.