Los consumidores de alimentos pagaron $3,6 por cada $1 que recibieron los productores
Es el promedio abonado en julio, que representó 260% de diferencia, según indicó un relevamiento de CAME.
Por los alimentos, los consumidores pagaron 3,6 veces más de lo que cobraron los productores agropecuarios en julio, según informó la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). De estos datos, se desprende que la brecha promedio entre los precios de producción y de góndola fue de un 260% durante el mes pasado.
"El consumidor inició el segundo semestre del año pagando en promedio $3,6 por cada $1 que recibió el productor de agroalimentos", señaló el Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) elaborado por el sector de Economías Regionales de la entidad, que analizó un total de 24 productos agropecuarios.
En promedio, la participación del productor en el precio final de venta fue del 25,6%. Es decir que explicó tan solo una cuarta parte del valor de góndola. La mayor participación la obtuvieron los productores de frutilla, mientras que la más baja la consiguieron los de zapallito.
Las cotizaciones de las 19 frutas y hortalizas que integran la canasta IPOD se multiplicaron por 5,98 veces en julio, por lo que el consumidor pagó cerca de $6 por cada $1 que recibió el productor frutihortícola.
En tanto, por los 5 productos y derivados ganaderos que componen la canasta, el consumidor abonó 2,77 veces más de lo que recibió el productor.
"El análisis demuestra que el productor primario no es formador de precios, por lo que tampoco es responsable de su escalada. En general, las diferencias entre origen y destino se deben a un conjunto de comportamientos como, por ejemplo, los especulativos, adoptados por diferentes actores de la cadena de valor que abusan de su posición dominante en el mercado. Básicamente, los hipermercados, los galpones de empaque y las cámaras de frío", aseguró el informe.
El zapallito (14,11 veces), el limón (14,03), la naranja (10,85), la manzana roja (8,43) y la zanahoria (6,83) fueron los 5 agroalimentos que presentaron mayor diferencia entre su valor de origen y destino.Lee también "No hubo ninguna solución": la respuesta del campo después de la reunión con el Gobierno".
En el caso de los cítricos, los productores explicaron la diferencia de precios campo-góndola por la sobreproducción en Entre Ríos, volcada al mercado interno. Mientras que el precio de origen tiende a bajar frente a una mayor oferta y una menor demanda, el de destino tiende a la suba y acompaña el contexto inflacionario", analizó el reporte.
Respecto del zapallito, la amplia brecha se produjo por un fuerte aumento mensual en los precios al consumidor, que fue superior al 40%. Mientras que en origen solo se registró un aumento del 10%. La manzana roja y la zanahoria, por su parte, mantuvieron "la gran diferencia de precios del productor al consumidor presentada en los últimos meses".
"Los productores de los agroalimentos con mayor diferencia entre campo y góndola, coincidieron en la falta de precios de referencia, provocada por la inestabilidad de la macroeconomía y su impacto en el valor de los principales insumos que utiliza la producción agropecuaria. A los inciertos costos de reposición se suma, además, una caída de demanda por pérdida de poder adquisitivo", indicaron desde CAME.
Entre los alimentos que presentaron menor diferencia entre lo que recibió el productor y lo que pagó el consumidor, se encuentran 2 de origen animal y 3 frutihortícolas.En el caso del ajo (3,11) y la frutilla (1,73) se encuentran fuera de temporada. "Sin embargo, esta última es una fruta que todos necesitan tener en góndola, por lo que el verdulero y/o el hipermercado resignan rentabilidad frente a un alto valor final de venta, achicándose así la diferencia entre el precio que recibió el productor y el que pagó el consumidor".
En relación a la cebolla (2,16), se observó un incremento mensual del 79% en verdulerías y 70% en hipermercados, que estuvo acompañado por una suba del 287% en los valores de origen.
Estas cotizaciones no fueron percibidas por los productores chicos, quienes ya habían vendido toda su producción, debido a la falta de oferta proveniente de Santiago del Estero.
"Se estima que el mes próximo ingresará la producción del norte argentino, lo que debería aumentar la oferta y disminuir los precios al productor", puntualizaron.
Con respecto a los productos y subproductos ganaderos, la menor diferencia entre origen y destino se debió a que los huevos (1,99 veces) y el pollo (2,08), por lo general, tienen sistemas de producción integrados, lo que significa que todos los actores de sus respectivas cadenas de valor son parte del riesgo del negocio.
En el caso del huevo, mientras que la cotización percibida por el productor aumentó intermensualmente un 13%, a nivel del consumidor los precios se incrementaron un 29% (hipermercado) y un 22% (minorista).Como sucedió en la cebolla y el huevo, otros productos que presentaron comportamientos disímiles en origen y destino fueron la lechuga y la leche, si bien no se ubicaron entre los de menores brechas.
Mientras que el valor que percibió el productor de lechuga se incrementó mensualmente en tan solo un 5%, a nivel del consumidor final los precios aumentaron un 19% (minorista) y un 4% (hipermercados).
El valor de la leche se encareció un 2% en origen con respecto a junio, pero en destino la situación fue otra: en la góndola del comercio minorista mostró un aumento del 10%, mientras que en los hipermercados fue del 8%.