La siembra de soja podría aumentar 700.000 hectáreas
La intención de siembra de la oleaginosa crecería 4,3% y alcanzaría las 16,8 millones de hectáreas. Sin embargo, la superficie de maíz de la campaña 2022/23 se contraería 4,7% y pasaría de 8,4 a 8 millones de hectáreas.
La siembra de soja podría crecer 700.000 hectáreas en la campaña venidera 2022/23 respecto al ciclo pasado y alcanzar las 16,8 millones de hectáreas, estimó hoy la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
De esta manera, la intención de siembra de la oleaginosa crecería 4,3% y pondría fin a seis campañas consecutivas de retroceso en el área implantada.
"Desde la campaña 2015/2016 hasta la 2021/22, la oleaginosa fue perdiendo casi el 20% del área sembrada. En el 2022 la tendencia se revertiría, la soja vuelve a subir", marcó la entidad.
Los técnicos explicaron que "el principal factor de influencia es el clima", ya que "con pronósticos climáticos poco alentadores y altas posibilidades de una Niña, que reincidiría por tercera vez, el productor la vuelve a privilegiar como una apuesta segura en un año de alta incertidumbre".
Otras razones apuntadas por la BCR están referidos a costos, disponibilidad de insumos y "los malos resultados del maíz temprano en la región central".
Teniendo en cuenta la nueva proyección de superficie y descontando 400.000 hectáreas que podrían perderse o no cosecharse, la entidad calculó que la producción alcanzaría las 47 millones de toneladas, 4,8 millones de toneladas por encima de la campaña anterior.
En contraposición, la superficie de maíz de la campaña 2022/23 se contraería 4,7% y pasaría de 8,4 a 8 millones de hectáreas.
"Los motivos detrás de la caída se centran principalmente en el clima, el fracaso de los maíces tempranos en la región central, el alto nivel de inversión y la incertidumbre actual", explicó la entidad.
Así, "pese a los mejores márgenes que presenta el cereal 2022/23 respecto de la oleaginosa, la falta de agua generalizada es el principal factor que pone en jaque la siembra de maíz temprano", mientras que "el escenario de incertidumbre desalienta aún más el cereal en favor de la soja".
Para su concreción, las lluvias de agosto y septiembre serán "fundamentales para las siembras tempranas", con marcas que deberán alcanzar los 100 milímetros en septiembre, aunque los productores "también contemplan más planes de siembra tardía a partir de diciembre con el objetivo de asegurar pisos de rendimiento".
A partir de esta nueva estimación, la BCR prevé una producción de 55 millones de toneladas, 4 millones por encima de la campaña pasada.