La inversión del sector agroindustrial cayó en el 2020
La inversión del sector agroindustria se estima en U$S 8.480 millones anuales en 2020, un 7% por debajo del año precedente debido a la cuarentena. Comprende erogaciones en construcciones, maquinarias y equipos de transporte.
Desde la Dirección de Informaciones y Estudios Económicos estimaron «la inversión anual que realiza el sector agroindustrial en la economía de Argentina, la cual alcanza un valor aproximado de U$S 8.480 millones, un 7% por debajo del año pasado (BCR, 2019)».
En el Informativo semanal No 1.927 se definió al "Sector Agroindustrial" como al conjunto de actividades de la agroindustria propiamente dicha como así también a la actividad primaria, que permite la obtención de las materias primas necesarias para su procesamiento. La agricultura, la ganadería, la apicultura, la acuicultura, la pesca, la silvicultura y la explotación forestal integran el sector primario de la economía, que comprende las actividades productivas de obtención de materias primas destinadas al consumo o a la industria, a partir de los recursos naturales.
La agroindustria es la actividad económica que comprende la industrialización y comercialización de productos agropecuarios, forestales y biológicos. Tiene a su cargo la fundamental tarea de transformar los productos generados en el sector primario, agregando valor a los mismos.
Por su importancia relativa, esta actividad es estratégica para el desarrollo económico y social de la República Argentina y tiene un gran potencial de crecimiento. Agrupadamente, el conjunto de empresas que trabajan cotidianamente en la agroindustria son pilares fundamentales para asegurar un mayor nivel de producción, agregado de valor, exportaciones y empleo con su consiguiente impacto positivo en la distribución del ingreso y la equidad social.
En otras notas del informativo semanal definimos a la inversión como los insumos y los gastos asociados a la siembra por parte de los productores en una campaña determinada. Estos insumos que se adquieren y los servicios que se contratan constituyen una inversión a nivel microeconómico, ya que estamos hablando del capital de trabajo que se pone a disposición de la actividad productiva en un ciclo determinado.
A nivel macroeconómico, cuando hablamos de inversión/1, nos referimos al flujo de bienes que incrementan el stock de capital de un sector o una economía en un período determinado, generalmente un año. Según el Sistema de Cuentas Nacionales 2008 (SNA, 2008), el stock de capital de un sector o de una economía se define como el valor de todos los activos fijos en uso, donde los activos fijos se describen como activos producidos (es decir, no incluimos la tierra donde se produce) que se utilizan repetidamente en el proceso de producción durante más de un año. Los activos fijos incluyen no solo edificios, estructuras, maquinaria y equipo, sino también «activos cultivados que producen productos repetidos como animales para la cría, lechería, tiro, etc., o árboles perennes, cultivos y recursos vegetales/2«.
Para simplificar el análisis, no se contabilizan en el cálculo de inversión los "activos cultivados o el crecimiento en el stock de animales" por considerarse muy complejo al momento de estimar y comparar el stock de capital del sector agrícola de muchos países. De esta manera, la inversión del sector comprende en este artículo principalmente erogaciones en construcciones, maquinarias y equipos de transporte.
Metodología:
Gran parte de la inversión que se hace en la economía argentina, año tras año, corresponde a construcciones tanto residenciales como no residenciales. Según datos del INDEC, el 55% de la inversión del año 2020 fueron asignados a construcciones. El resto de la Formación Bruta de Capital Fijo (FBCF) se agrupa en maquinaria, equipos y transporte. Esta clasificación surge de las consideraciones que se toman en la medición de las cuentas nacionales, elaboradas por el INDEC. Según cálculos del INDEC, en el año 2020 la inversión total alcanzó en Argentina un valor de 54.068 millones de dólares.
En la metodología de Valverde (2018) se aplica una participación aproximada de la inversión del sector agricultura y pesca, al 9,5% del total de la inversión en maquinarias y equipos y un 6,8% de la inversión en construcción no residencial. Como se considera que la agroindustria abarca sectores manufactureros, de transporte y de comercio adicionales, en base a las participaciones de las actividades incluidas en Coremberg (2018), se aproxima la participación de la agroindustria en la inversión de maquinarias y transporte en el orden del 20,8% y del 11,8% de la construcción total. Aplicando estas participaciones a los datos brutos del INDEC, sumados a la inversión en otros activos, se arriba a una inversión total del sector del orden de los 8.490 millones de dólares en el año 2020.
Este valor se trata de una aproximación puntual a la inversión realizada por el sector agroindustrial en el año 2020. Si tomamos el método de aproximación descrito en el párrafo anterior, se puede aproximar la inversión del sector agroindustrial para el período 2004-2020. Para una estimación más precisa se debería replicar la metodología de Valverde (2018) utilizando y agregando los sectores desde las fuentes de información primarias que componen el sector agroindustrial y calcularlos para todo el período determinado. Los datos de la inversión para el sector agrícola, silvicultura y pesca se aproximan a los datos estimados por Vander Donckt y Chan (2019) a través de otras metodologías de imputación como la estimación MCO "pooled" de modelos de regresión en países para los que se dispone de algunos datos.
Se puede notar en la serie una caída importante en los valores calculados para el año 2018 a 2020. La reducción en la inversión de estos años tuvo que ver con varios factores que se unieron en su momento, tales como:
a) la sequía más importante de los últimos 50 años, en el año 2018;b) el aumento en la tasa de interés doméstica en el año 2019;c) menores precios internacionales de los commodities, comparado con el ciclo 2011-2014;d) el aumento en el tipo de cambio y el incremento en los derechos de exportación en diversos sectores de la matriz agroexportadora;e) para el año 2020, la cuarentena por covid-19 afectó fuertemente a muchos sectores incluidos en el complejo agroindustrial.
En el año 2020, cabe resaltar que la inversión del sector siguió disminuyendo. La caída de la inversión del sector en el año 2020 se puede corroborar con otros indicadores, como el patentamiento de comerciales pesados y camiones, la venta de maquinaria agrícola o las importaciones de bienes de capital en general.
En la literatura reciente se encuentran dos trabajos en donde se calcula la FCBF por diferentes sectores. Uno elaborado por Coremberg (2009) realizado en el marco del proyecto ARG ARKLEMS y el trabajo de Valverde (2018) realizado en el marco del proyecto LA-KLEMS coordinado por CEPAL y financiado por el BID. En el trabajo más reciente, el que se utilizó como base, Valverde (2018) calcula la FBCF del sector agrícola y pesca en base a diferentes datos sectoriales: los Informes Sectoriales de Maquinaria Agrícola del INDEC, los Informe de la Industria de Maquinaria Agrícola del INDEC, el Informe del Sector de Maquinaria Agrícola de la Provincia de Santa Fe, cuadros de oferta - utilización del INDEC, Presupuesto de la Administración Nacional - Gastos por finalidad, función y naturaleza económica y Cuentas Ahorro - Inversión en base devengado del Ministerio de Hacienda. El valor de este se encuentra presentado en el gráfico adjunto acompañado de la evolución del valor agregado del sector agrícola, todo medido en dólares estadounidenses corrientes.
Se considera que, para tener una verdadera dimensión de la inversión del sector agroindustrial en Argentina, no sólo debemos tomar el aporte del valor agregado del sector agropecuario y pesca, sino también se debe tomar el aporte a la producción de las etapas manufactureras que conforman el sector agroindustrial y por lo tanto, agregan valor a estos productos primarios aguas abajo. En la metodología de Valverde (2018), sólo se ha hecho un cálculo de la FBCF para el sector manufacturero de manera agregada. En posteriores trabajos se podría reproducir esta metodología para obtener la inversión del sector agroindustrial, utilizando las fuentes primarias de datos para inferir el aporte del sector a la formación bruta de capital de toda la economía.
Fuente: BCR News