Las multinacionales ya concentran 65% de las ventas de maquinaria
La cifra incluye la comercialización de productos importados y los equipos nacionalizados en las plantas que las compañías globales poseen en el país.
Dos de cada tres pesos que factura el sector de la maquinaria agrícola en Argentina corresponden a productos de marcas internacionales.
La cifra incluye los productos importados en sí, más los equipos nacionalizados por empresas globales con plantas industriales en el país.
En apenas dos años, la participación de las marcas internacionales en la torta general del sector creció 25 puntos porcentuales.
Y su presencia promete seguir en ascenso a la luz de las últimas estadísticas.
Si bien todo el negocio de las máquinas muestra números en alza, el crecimiento es mucho más acelerado por el lado de los equipos de marcas internacionales.
Importados
En los últimos meses, una veintena de marcas internacionales de maquinaria agrícola oficializaron su desembarco en el mercado nacional. La lista incluye proyectos de radicación industrial, acuerdos de complementación con fábricas nacionales y desarrollos puramente comerciales.
En el caso de los equipos importados propiamente dichos, el crecimiento evidenciado en los últimos años ha sido vertiginoso.
Según las estadísticas del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) entre enero y setiembre de 2017 se comercializaron máquinas importadas por $ 7.055 millones, con una participación de 32% en las ventas totales del sector. En 2015, ese renglón sumaba apenas 12% del mercado general.
Al 32% apuntado habría que sumar las ventas de sembradoras importadas, por cuanto desde hace dos años el Indec no ofrece información discriminada según su origen en este rubro.
Con todo, los $ 7.055 millones reportados como ventas de equipos importados en los tres primeros trimestres del año pasado representan un alza de 158% respecto a igual periodo de 2016... y de 650% con relación a enero-setiembre de 2015.
Por cierto, en el mismo tiempo también crecieron las ventas de equipos nacionales, pero a un ritmo sensiblemente inferior.
En nueve meses de 2017 las colocaciones de equipos fabricados en el país aumentaron 40% respecto a similar periodo de 2016; y 128% con relación a 2015, según los datos del Indec.
Nacionalizados
Claro que la participación de las marcas globales en el mercado local tiene un capítulo igualmente importante por el lado de los productos fabricados en las plantas que las multinacionales poseen en el país.
Si bien en este caso los datos son menos precisos, ya que el Indec no ofrece información discriminada en tal sentido, se estima que los productos nacionalizados ya suman otro 30/35% de las ventas totales.
Así las cosas, el mercado de la maquinaria agrícola 0 Km se reparte actualmente en tres tercios de proporciones similares entre los productos importados, los nacionalizados y los fabricados por la industria local.
Rubros
Buena parte del auge de los productos globales se entiende mejor al analizar el desagregado por rubros.
Las marcas internacionales tienen una presencia determinante en las ventas de tractores y cosechadoras, dos segmentos que por sí solos explican 67% de la facturación total en equipos 0 Km.
En el caso de los tractores, los modelos directamente importados totalizaron 38% de la facturación del rubro entre enero y setiembre de 2017.
Durante el último año se presentaron 96 modelos de tractores en Argentina, de los cuales sólo 2 corresponden a lanzamientos de euipos nacionales.
En cuanto a las cosechadoras, los modelos ingresados desde el exterior concentraron 36% de la facturación total.
En ambos casos, a las sumas apuntadas debe sumarse el fuerte componente de productos nacionalizados.
Cabe recordar que las principales multinacionales radicadas en el país (John Deere, Agco, CNH Industrial, Claas, Agrale) cuentan con plantas dedicadas, precisamente, a la fabricación local de tractores y cosechadoras, además de motores y otros productos.
También es significativo -cuando no hegemónico- el aporte de las marcas globales en segmentos de mercado de importancia creciente, como las picadoras de forraje y las megaenfardadoras, por ejemplo.
Incluso en rubros tradicionalmente dominados por las marcas locales comienza a observarse una presencia importante de la oferta externa.
El caso más notorio es el de las pulverizadoras, donde la importación ya superó el 20% de la torta. En dos años, los ingresos de equipos extranjeros se multiplicaron por seis.
También se observa mucha actividad en materia de lanzamientos de equipos importados en los segmentos de rotoenfardadoras, mixers, segadoras y fertilizadoras.
¿Qué pasará con las sembradoras? Por ahora, la presencia de equipos importados es menor, aunque algunas marcas globales ya han dado señales de querer dar batalla también en este rubro, el más emblemático de la industria nacional.